Desarrollo de la inteligencia emocional de los niños

Mientras nos divertimos, podemos enseñar y desarrollar nuevas habilidades en nuestros hijos todos los días. Y no nos referimos sólo a la motricidad o la forma física. Divertirse juntos también es una gran oportunidad para emprender actividades que le enseñarán al niño a reconocer sus propias emociones y las de otras personas, nombrarlas y también ayudar en general a hacer frente a diversas situaciones. ¿Por qué es tan importante el desarrollo de la inteligencia emocional de los niños?

¿Qué es la inteligencia emocional?

Según Daniel Goleman, psicólogo estadounidense, la inteligencia emocional es la capacidad de aprender habilidades prácticas, que incluyen: autoconciencia, motivación, autogestión, empatía y buenas relaciones con los demás. ¡Es esta habilidad la responsable de una buena adaptación al entorno, relaciones interpersonales exitosas e incluso éxitos profesionales!

La inteligencia emocional en los niños comienza a formarse en el momento del nacimiento, pero su correcto desarrollo recae en la edad preescolar. Luego, el niño absorbe el mundo que lo rodea, aprende a reconocer sus propios sentimientos y los de los demás y, al mismo tiempo, aprende a lidiar con los problemas.

Mientras juegan, vale la pena aprovechar la curiosidad y las ganas de imitar de los niños, porque así es como los bebés van conociendo el mundo que les rodea. Para ello, puedes utilizar juguetes, que seguramente serán muchos en casa.

El desarrollo de la inteligencia emocional en el ejemplo de las profesiones

Una forma de desarrollar la inteligencia emocional de los niños puede ser, por ejemplo, hablar de las ocupaciones de los adultos. Al contarles a los niños sobre personas que realizan trabajos más o menos complejos, vale la pena considerar juntos qué habilidades debe tener para convertirse, por ejemplo, en policía o médico. También podemos plantear preguntas como: qué debe ser capaz esa persona, qué cualidades debe distinguir para hacer bien su trabajo, y luego buscar juntos respuestas a ellas. Para ilustrar mejor el tema, vale la pena usar juguetes, por ejemplo, bloques o muñecas . Tal charla, combinada con el aprendizaje, también enriquecerá el vocabulario de los niños pequeños.

Los juegos de este tipo enseñan a los niños a ver el mundo a través de los ojos de otras personas. Es más fácil para el niño desenvolverse en grupo, es empático y dispuesto a ayudar.

El propósito de tales actividades también es concienciar a los niños de que en diversas situaciones las personas pueden experimentar y experimentar estados emocionales que pueden expresarse a través de expresiones faciales, gestos o movimientos.

Vale la pena mostrárselos a los niños, por ejemplo, mediante juegos de rol juntos, porque a través de estos juegos, los niños se preparan para distinguir las emociones experimentadas por los demás. También aprenden a aceptar aquellos que difieren de sus propios sentimientos.