¿Cómo cuidar el ombligo de un recién nacido?
Si bien los padres jóvenes leen mucho sobre la alimentación o el cambio de bebés, en los manuales no se menciona con tanta frecuencia cómo cuidar el ombligo de un bebé recién nacido. Con los años, los consejos de los médicos sobre cómo cuidar el ombligo de un recién nacido también han cambiado.
Por lo tanto, vale la pena refrescar este conocimiento. Un muñón de ombligo delicado, un remanente de un cordón umbilical cortado, debe manipularse adecuadamente durante las actividades de higiene diaria. Un cambio de color de azulado a negro, un ligero sangrado o un mal olor pueden aterrorizar a los padres inexpertos. Descubra qué temer a medida que su ombligo sana y qué debería alertarlo. El cuidado descuidado del ombligo de un recién nacido puede tener consecuencias negativas.
¿Qué es y cuándo se cae el cordón umbilical?
El cordón umbilical no es más que la vena que conecta al feto con la placenta de la madre. Después de cortarlo, queda un muñón, que la partera asegura con una pinza especial justo después del nacimiento. El médico retira el broche después de aproximadamente dos días. Durante los próximos días, las mañanas sanan.
El muñón del cordón umbilical se seca, se endurece y cuando se pone negro se cae, dejando un ombligo de forma individual para toda la vida. Este proceso toma un promedio de 10 a 14 días. Sin embargo, puede extenderse hasta 3 semanas, especialmente si está húmedo durante mucho tiempo.
Nota importante: ya que el cordón umbilical permanece negro, ¡no lo arranque a la fuerza! Deja que se separe solo. “Ayudar” puede llevar a complicaciones. Para que todo el proceso funcione sin problemas, es extremadamente importante cuidar adecuadamente el muñón del cordón umbilical. Es muy susceptible a las infecciones.
Sin embargo, antes de pasar al cuidado adecuado, detengámonos un momento. Algunos padres están preocupados por el aspecto del ombligo después de que se haya caído el muñón. ¿Se ha curado bien o se acabó? Se enrojece al principio. La secreción marrón puede continuar saliendo de él durante la próxima semana o dos. No te preocupes, esto es perfectamente normal. Un ombligo completamente curado puede ser cóncavo o ligeramente convexo. Todo depende de cómo se llevó a cabo el proceso de curación.
¿Cómo cuidar el ombligo de un recién nacido en casa?
Cuando un niño pequeño sale del hospital, es responsabilidad de los padres asegurarse de que no se produzca ninguna infección en el ombligo en proceso de curación. Recuerda que aunque no se pudre ni orina sangre, sigue siendo una herida que necesita un cuidado adecuado. Antes de salir del centro médico, es posible que desee hablar con su médico o enfermera sobre el cuidado del ombligo de su recién nacido. También es una buena oportunidad para averiguar qué lavar el ombligo de tu recién nacido.
El muñón se cae cuando está suficientemente seco. Por lo tanto, el aseo debe ser seco. Sin embargo, esto no significa que deba proteger el sitio de cualquier contacto con el agua. ¡De lo contrario! ¡El ombligo sana más rápido no solo cuando está seco, sino también cuando está limpio!
Por ello, una vez al día, por ejemplo durante el baño de la tarde, limpie suavemente el ombligo del bebé con agua. También puedes usar jabón (preferiblemente delicado, hipoalergénico). Sin embargo, no metas a todo el bebé (incluido el ombligo) en el agua, ¡es demasiado pronto para eso!
El libre flujo de aire también acelera la curación. Por lo tanto, si no es necesario, no cubra el ombligo del bebé ni lo cubra con una tirita. Dobla el pañal hacia arriba para que no cubra el muñón.
También hay pañales recortables especiales en el mercado. Vista al niño con ropa aireada hecha de algodón natural para que el aire pueda llegar libremente al muñón del ombligo. Esto es especialmente importante en el verano. Un ombligo sudoroso (húmedo) sin acceso al aire es una forma sencilla de que las bacterias que causan infecciones se multipliquen.
No unte el área de curación con cremas, ungüentos ni rocíe con polvo. Limitan el acceso al aire y no aceleran la curación en absoluto.
Como has podido leer, el cuidado adecuado del muñón del cordón umbilical y el ombligo en sí no deben pasar a un segundo plano. Es muy importante porque un uso inadecuado puede dar lugar a complicaciones desagradables. Afortunadamente, este tipo de cuidado solo dura las primeras semanas.